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Últimamente estamos asistiendo a la publicación de diversos mangas basados en videojuegos.Mientras que Norma lleva un tiempo editando los cómics basados en The Legend of Zelda y Monster Hunter, la editorial Glénat se suma a la iniciativa con la adaptación a la narrativa gráfica de la saga Devil May Cry.

Creada por Capcom, el primer título de Devil May Cry apareció en 2001 para la consola Playstation 2 y obtuvo un gran éxito gracias a su jugabilidad bien ajustada y al carisma del protagonista. Se trataba de un hack and slash (un juego en el que el principal objetivo es eliminar a los rivales que nos surgían al paso con las diversas armas y poderes disponibles) con una ambientación gótica en el que debíamos vencer a innumerables demonios. La segunda parte apareció en 2005 y, aunque fue bien acogida, suscitó ciertas críticas al cambiar elementos de la primera entrega. La tercera parte retomó elementos del juego original con la variedad de tratarse de una precuela cuyo argumento giraba en torno a la relación de Dante con su hermano gemelo Vergil. La última entrega hasta la fecha es Devil May Cry 4, para Playstation 3 y Xbox 360, aunque actualmente está siendo desarrollado DmC por un estudio occidental que pretende relatarnos las aventuras adolescentes de Dante y cuyo re-diseño del protagonista ha resultado polémico.

El éxito de la saga ha propiciado la aparición de diversos productos derivados como novelas, series de animación o participaciones en otros videojuegos, como es el caso de Marvel vs Capcom 3. En el caso que nos ocupa, nos encontramos con el manga Devil May Cry 3 realizado por Suguro Chayamachi y publicado en Japón desde 2005. El argumento de este cómic se sitúa antes de los eventos ocurridos en el videojuego, por lo que viene a explicar cómo surge el conflicto entre Dante y su hermano gemelo Vergil. Así, Dante aparece como un joven y atractivo cazademonios que acepta las misiones más variopintas con el fin de poder vengarse de aquellos que asesinaron a su familia. En el primer volumen del manga veremos cómo, gracias a la intervención de Enzo, Dante es contratado para rescatar a una niña pequeña llamada Alicia que ha sido secuestrada. Dante se sumerge en una especie de País de las Maravillas demoniaco (con sombrerero loco inclusive) en el que tendrá que lidiar con diversos enemigos. El cómic también presenta a Vergil y Arkham, aunque adquirirán mayor protagonismo durante el segundo volumen.

Básicamente, el cómic se dedica a explorar la personalidad opuesta de los dos hermanos y a explicar cómo se producen los acontecimientos que llevan hasta el tercer juego de la saga. Por ello, dado su carácter introductorio, no es necesario haber jugado a los videojuegos para poder seguir la historia aunque resulta obvio que aquellos lectores familiarizados con la saga disfrutarán más. En general, la premisa argumental es bastante débil y no consigue ninguna profundidad más allá de la mecánica de "acabar con todos tus enemigos cuanto antes" que, si en un videojuego resulta entretenida porque nos obliga a machacar botones continuamente, en un cómic se convierte en muchas páginas de acción, disparos y ataques que, a la larga, puede terminar saturando al lector. Tampoco la personalidad de Dante está del todo conseguida pues la versión en cómic se antoja menos provocadora y arrogante que la del videojuego, aunque sí que suelta alguna bravuconada de vez en cuando.

En lo que respecta al apartado gráfico, el dibujo de Chayamachi cumple con creces su cometido. La experiencia de esta autora en el género del shounen ai es evidente en su construcción de Dante, muy atractivo y con diversas escenas en las que aparece con el torso al descubierto. Si el dibujo de los personajes humanos es correcto, las imágenes de los demonios dejan un tanto que desear y hubiera sido deseable encontrar enemigos más macabros o siniestros. En lo que respecta a la acción, la narrativa de Chayamachi es un tanto desorganizada y no nos permite seguir las batallas de forma plena, es decir, no consigue transmitir un sentido de espacialidad consistente, por lo que los combates de Dante contra los demonios resultan un tanto difíciles de seguir pues no sabemos dónde está él y dónde están sus enemigos, sino que simplemente lo muestra disparando y asesinando por doquier.

Aunque en un principio estaba previsto que el manga de Devil May Cry 3 estuviera compuesto por tres tomos (el último de ellos centrado en Lady), la serie se quedó tan sólo en dos volúmenes. Esto no afecta demasiado al argumento, pues podemos conocer el desenlace del enfrentamiento entre Dante y Vergil en el propio videojuego, pero aun así carecemos de la presencia de un personaje de la saga. Glénat nos ofrece una edición muy buena del cómic dentro de su línea Seinen Manga. Así, encontramos un papel de calidad, una impresión en blanco y negro muy buena e incluso páginas a color. El cómic incluye también varias páginas extras con información sobre los personajes protagonistas, sus armas y la historia del videojuego. No obstante, el único aspecto negativo es el número de páginas (160), demasiado escaso. Quizás hubiera sido una buena idea unir los dos volúmenes de la colección en un tomo único, aunque el precio hubiera sido mayor.

Devil may cry 3 es un manga surgido a la sombra de un videojuego, con algunas de las desventajas que ello conlleva. La historia es un tanto superficial y probablemente no atraiga lo suficiente a aquellos lectores ajenos al mundo del videojuego. El dibujo es más que correcto aunque se echa en falta algo de mayor dinamismo y crudeza en las escenas de lucha. Por todo ello, considero que este cómic será disfrutado principalmente por los fans de los videojuegos de Devil may cry.